martes, 24 de febrero de 2009

30 Minutos y 10 Segundos.


Y me dijo: volveré por ti:) -me gusta cuando me lo dice... me hace creer que soy importante aquí.- Él caminaba a mi derecha como siempre -es un desesperante gusto suyo. - Pero así lo quiero. Tan loco, loco, loco, tan él. Y yo le dije: Te estaré esperando. - se que le gusta, porque así sabe que es importante para mi. -

Se dio cuenta que estábamos a solo 30 minutos de su partida. Me abrazó muy fuerte y me sentí de él, como si perteneciera a sus brazos. Y soy de él, pertenezco a sus brazos.
Faltaban 25 minutos. Él me beso -y sentí cómo es cuando se ama. Y me enamoré -

19 minutos. Se le escapó un te quiero... Nos quedamos en silencio, porque todo esto duele, me duele. Después de 4 minutos empezamos a caminar, él a mi derecha -como siempre- Amor, mi lado derecho es más bonito? Él sólo sonrió y me dijo loca. Me contó un chiste, el mismo que me contó ayer, el mismo que me contará mañana; y yo me reí, y mañana también me reiré. - porque a él le gusta cuando me rió-

Faltaban 12 minutos, y volvió a ser feliz - a él le gusta ese número, sabes?- Me quedé mirándolo, y sin querer me detuve (pero yo se que él fue el que me detuvo, al dejarse mirar). Entonces, cuando no me vio a su lado izquierdo, volvió por mi, y me encontró parada, mirándolo. Sólo me dio un pequeño beso y me devolvió los 78 latidos que había perdido en un minuto detenida en el tiempo. Seguí avanzando de su mano izquierda, y él de mi mano derecha.

Faltan sólo 8 minutos, me dijo triste. Tengo miedo. Le respondí. Y el brillo de sus ojos me contó que él también tenía miedo. - Y mi corazón me gritaba: Pídele que se quede! Pero enseguida mi mente le respondió a mi corazón, diciéndole que se calle - Si él se va es por su bien, sabes?

En 3 minutos le conté tantas cosas... tantos sueños a su lado, tanta felicidad que ha traído a mi vida. Le conté que lo amo... que lo voy a esperar. Y le pedí que no tenga miedo, que crea en mi. Que quiero ser de él y quiero que sea mío. Y Faltando 5 minutos, me dijo: ¿Por qué estás tan callada? -Hay cosas que no puedo decirte, sabes? pero las siento (Entonces me di cuenta de lo tonto que es guardarme todo esto, por eso te escribo..)

Le intente explicar, pero se acababa el tiempo. A veces él me dice: que quieres decirme? Porque sabe que algo guardo. Pero me quedo callada, no encuentro palabras... Y es ahí cuando él cree que no lo quiero. Por eso le cuento todo -porque a veces no digo nada- Y sólo le digo: tengo tantas cosas que decirte. -Una de ellas es que te amo, sabes? -

Y yo seguía en silencio. Y ante la pregunta que me hizo faltando 5 minutos, simplemente respondí: Nada...
Y faltaba 1 minuto.
Me dijo: volveré por ti. Y yo le respondí: Te esperaré.

Cuando se acabó el tiempo, dio media vuelta y empezó a partir. Corrí tras de él y le di un beso - el último beso en mucho tiempo -
Empezó a llover, como si Dios o quien este arriba de alguna manera intentara demostrar mi dolor. No lloré, pero no fue porque no estuviera triste, sino porque mis lágrimas se hubieran acabado. - Y las estoy guardando para todos los bellos momentos que nos quedan por vivir, sabes?- Me abrazó y se fue. Se fue sin voltear a verme, se fue...

Me quede ahí, y después de 10 segundos susurré: Te extraño...
Y aquí estoy, esperándote.